Colo Colo: los goles llegaron desde la banca

Pocas veces Colo Colo había comenzado jugando peor en este campeonato de Transición.  Pocas veces, sin embargo, había terminado mejor, venciendo con claridad a San Luis por 3 a 0 y dejando la impresión, además, que de haber estado más fino en la definición Paredes, el marcador pudo alcanzar cifras mucho más expresivas.

Y es que, transcurridos 25 minutos de partido, Colo Colo no sólo no tenía la pelota, sino que las pocas veces que lo lograba no demoraba nada en perderla. Su fútbol era tan poco fluido que no bastaba con la habitual presión de San Luis para desdibujar a un cuadro que parecía absolutamente perdido en el campo de juego.

Lo único alentador para el público albo, que llegó en gran número al Monumental aprovechando los precios populares que se fijaron para las entradas, era que, si bien el elenco quillotano abortaba con facilidad cada atisbo de combinación del Cacique, con el balón en los pies no era mucho lo que podía prosperar.

De hecho, en todo el primer tiempo el meta albo Orión no atrapó ningún disparo directo. La única aproximación quillotana fue un tiro elevado de Leal que se perdió por sobre el travesaño.

El nerviosismo del público albo, que veía con toda claridad lo mal que jugaba su equipo, al no transformar su incomodidad ni en murmullo ni en silbatina al parecer no alcanzó a permear a los jugadores, que superados esos 25 minutos iniciales de espanto pudieron por fin coordinar y acercarse con más posibilidades al arco de Ignacio González.

Precisamente, a los 26, San Luis tuvo la primera señal de alerta, luego que Paredes, entrando el área por la derecha, expidió un furibundo zurdazo que el meta quillotano apenas repelió de apuro. El balón fue hacia la banda, permitiendo la entrada de Opazo que, en lugar de buscar el arco, ensayó un centro tan violento que Vilches no alcanzó a empalmar cuando el arco estaba desguarnecido.

Sólo dos minutos después, y cuando ya Paredes había dejado ir otra clara oportunidad, Colo Colo encontró la apertura de la cuenta. Baeza cedió a Villanueva, el juvenil volante que reemplazó a Valdivia la abrió para Opazo y el lateral volante, que por fin actuaba de titular, sorprendió a todos enganchando hacia adentro y despachando un zurdazo que superó el leve adelantamiento de Ignacio González para meterse en un rincón alto.

Ese gol tuvo el mérito de devolverle a Colo Colo su extraviada armonía inicial. Porque ya cerca del final de la etapa Valdés, tras recibir de Paredes, despachó un furibundo remate ante el cual el meta de San Luis tuvo que exigirse a fondo para evitar la segunda caída de su valla.

La ventaja no era, sin embargo, para nada tranquilizadora. Podía pasar lo de la pasada fecha, en Iquique, cuando un gol de ventaja no fue suficiente para traerse los tres puntos. O podía darse, una vez más, el que en tres partidos (uno por Palestino y dos por Colo Colo), Pablo Guede no había podido derrotar desde la banca a Miguel Ramírez.

Ya sea porque San Luis volvió a ejercer una adecuada presión, ya fuera porque Colo Colo optó por el repliegue para evitarse sorpresas desagradables, el hecho es que el elenco quillotano volvió a manejar el encuentro, aunque sin poder encontrar los claros que lo pusieran a tiro de gol.

Y desarrollándose de esa forma el partido, Colo Colo encontró en un contragolpe velocísimo y letal el gol que contribuiría a tranquilizarlo definitivamente. Cerca del círculo central, Paredes empalmó de primera un rechazo, metiendo un pase profundo para Valdés que dejó a tres jugadores albos corriendo contra un solo defensor “canario”.

Valdés, entrando al área, eludió con preciso dribling la oposición del solitario defensor y, en lugar de rematar, la puso al medio para la entrada del juvenil volante Villanueva, que cumplió un debut soñado actuando en lo que es su posición verdadera: no tuvo más que empujarla hacia las redes.

San Luis no dejó de luchar, de correr y marcar, pero conforme avanzaba el partido quedaba cada vez más clara su absoluta impotencia ofensiva.

Y Colo Colo, que ya jugaba suelto, no desaprovechó la oportunidad de aumentar el marcador. Paredes, que cuando no convierte sigue mostrando su importancia como eximio habilitador, le metió una buena pelota a Vilches. El delantero, que pudo intentar él, tuvo sin embargo la misma generosidad que antes había exhibido Valdés para meterle un balón profundo a Opazo, que entrando destapado por la derecha eludió el achique del meta quillotano con un disparo que llegó a la red tras colársele entre las piernas.

Un triunfo al final claro a inobjetable el de Colo Colo sobre un cuadro al que en los últimos confrontes no había podido superar. Todo un respaldo anímico para el compromiso que viene: frente a Universidad Católica, en San Carlos

PORMENORES

Torneo de Transición. Séptima fecha.

Estadio: Monumental.

Público: 30 mil espectadores, aproximadamente.

Arbitro: César Deishler.

COLO COLO: Orión; Zaldivia, Barroso, Meza; Opazo, Valdés (72’ Maturana), Baeza, Suazo; Villanueva (68’ Araya); Vilches (90’ Bolados), Paredes.

SAN LUIS: I. González; Ramírez, Díaz, Rojas; Rodrigo González, Leal, Césped (71’ Ruiz), Bravo (46’ Saavedra); Martínez, Caballero y Ronald González (46’ Cháves).

GOLES: Opazo, a los 28’ y 70’, Villanueva a los  63’.

Tarjetas amarillas: en Colo Colo, Barroso; en San Luis, Rojas, Ramírez y Díaz.