Matías Pérez García

Matías Pérez García, otro que no alcanzó la gloria

Universidad de Chile, que había alzado uno de los trofeos en 2009 (Apertura), no pudo reeditar el logro, y concentró sus esfuerzos en la Copa Libertadores, donde fue eliminada en semifinales. Finalmente, el cuarto lugar (tras Audax) fue demasiado decepcionante para el equipo que presentó finalmente a Jorge Sampaoli como entrenador para 2011.

Así, las noticias en torno a la “U” mostraron a poco de iniciado el año la llegada de varios jugadores que retornaban a la escuadra azul, dispuestos a escribir una de sus más grandes historias: Johnny Herrera, Marcelo Díaz y Charles Aránguiz, entre otros.

Sin embargo, la mayor esperanza se depositó en un desconocido nombre que había hecho buenas campañas en All Boys de Argentina: Matías Pérez García, quien se hizo con la camiseta número 10 y asomó como pieza clave en la pretensión táctica de Sampaoli, previo pago de 100 mil dólares a la tienda trasandina.

Pérez García inició bajo la confianza de la titularidad en los tres partidos que disputó la “U” antes del inicio del torneo. Sin embargo, los resultados no acompañaron al equipo que no ganó ninguno de los juegos, y vieron cómo el flamante 10 no terminaba ninguno de los partidos en la oncena.

Ya con el torneo de Apertura iniciado, los azules encadenaron una serie de buenos resultados que se cortaron recién en la quinta fecha, con una derrota ante Santiago Morning. Tras el traspié, los hombres de Sampaoli encadenaron una correcta serie de resultados que lo instalaron cómodamente en los playoffs del torneo, a tres puntos del líder (Universidad Católica).

Pero a medida que el juego azul entraba en una espiral ascendente, Pérez García veía alejarse sus posibilidades de titularidad. Es más, en ninguno de los nueve partidos en que intervino en el citado torneo, fue titular. Escasos 147 minutos en cancha condenaron a la intrascendencia el aporte del argentino, que siempre que saltó al terreno lo hizo con el resultado sentenciado, sin gravitar y menos conseguir goles.

El 21 de mayo de 2011, en la última fecha de la fase regular, se vio la última actuación de Pérez García en la oncena azul. Lo que vino después para el equipo fue inolvidable: la eliminación a San Felipe, goleada ante O’Higgins en semifinales y el épico 4-1 de la final de vuelta ante los cruzados.

Los descargos del argentino llegaron por Twitter: “Quiero recuperar la alegría que sentía dentro de una cancha y esta persona me sacó”, escribió en directa alusión a Sampaoli. Finalmente, como tantos otros, volvió a su lugar en el mundo del fútbol (All Boys), donde una buena campaña le permitió regresar a Chile a discutir una oportunidad en los azules, cosa que no logró, iniciando un periplo por varios clubes en pos de la consagración que nunca llegó.