Sin fútbol, pero con fe la Rojita Sub 17 se juega la vida ante México

Los resultados de los otros grupos en el Mundial de la India permiten a Chile disputar su último encuentro con la posibilidad de pasar a octavos de final entre los cuatro mejores terceros.

Pese a su decepcionante actuación ante Inglaterra e Irak, la Rojita Sub 17 aún tiene posibilidades de clasificar a octavos de final en el Mundial de la India.

Suena raro, pero es así, porque favorablemente para sus esperanzas en tres de los cuatro grupos ya cerrados los terceros lugares fueron ocupados por países cuyo puntaje el equipo chileno puede superar.

El reglamento del torneo establece el paso a octavos de final de las 12 selecciones finalizadas primera y segunda en los seis grupos y de otras cuatro clasificadas como “mejores terceras”.

Los elencos ya situados en tercer lugar en sus grupos son Estados Unidos (6 puntos), Níger (3), Nueva Zelanda (1) y Guinea (1). Chile esta último en el Grupo F con 0 puntos y enfrentará hoy a México, que acumula 1. De ganar, la Rojita sumará 3 unidades y superará de inmediato a neozelandeses y guineanos, asegurándose un cupo como al menos “cuarto mejor tercero”. Una igualdad no le sirve puesto que en ese caso México sería tercero con 2 puntos.

Es un acicate inesperado para el equipo de Hernán Caputto que ayer llegó a Guwahati –sede del partido definitorio- derrumbado y casi dándose por ya eliminado luego de ser goleado por 0-4 y 0-3 por Inglaterra e Irak, respectivamente.

En sus declaraciones en esta ciudad, cuyo calor y humedad al menos ayer jueves eran peores que en Calcuta, Caputto dijo que el duelo contra los aztecas les serviría para lavar el honor y demostrar que su nivel era algo mejor que el mostrado en el mundial.

Es seguro que tras enterarse de los últimos resultados, el argentino está intentando re motivar a sus chicos cuyos rostros desolados hasta ayer eran elocuentes. Su única chance es devolverles ese amor propio inclaudicable que en el sudamericano clasificatorio fue un sello destacado.

Estadísticamente, entonces, la posibilidad clasificatoria está vigente. Tan factible como lejana está si el análisis se centra en lo futbolístico.

Extrañamente, en los dos lances iniciales la Rojita olvidó su seguridad defensiva y no supo resguardar su pórtico. Comprensible en el duelo con los británicos, ampliamente superiores, pero no en el jugado con los iraquíes. Si bien estos fueron mejores, los chilenos bien pudieron replegarse mejor e intentar mantener el empate.

No ocurrió así. Hubo yerros groseros que facilitaron a los meritorios iraquíes obtener una victoria merecida.

Para el partido de mañana en el Indira Gandhi Athletic Stadium (11:30 horas) Caputto no ha dado señales todavía de cuál será la alineación. Es muy posible que reintegre a Junior Bórquez en el arco (expulsado contra Inglaterra) y mantenga íntegra a su defensa, que aun cuando no ha respondido a su confianza la ha sostenido a lo largo de todo el proceso. Hacia adelante puede haber cambios porque todos los postulantes han andado igual de mal.
Lamentablemente, en este caso la incógnita obedece a la condena de elegir a lo menos malo.

Un rival superior

Si el todo o nada de este sábado puede salir mal, en gran medida ello obedecerá a que México es una selección poco propicia para una hazaña.

Tienen alcurnia los aztecas en esta categoría. Dos veces campeones mundiales, una vez subcampeones y una vez cuartos, la serie sub 17 les acomoda mucho porque a esa edad lucen una madurez táctica difícil de hallar en sus rivales.

Sus dos títulos lo así reflejan.

El primero fue conquistado en Perú, en 2005. La final la ganaron a Brasil con un irrefutable 3-0. Jugadores de alto nivel ya de adultos como Giovanni dos Santos, Carlos Vela y Héctor Moreno eran sus baluartes.

La segunda corona llegó en 2011 gracias a doblegar 2-0 a Uruguay en el partido final. De aquel plantel no hay ninguno actualmente seleccionado a nivel mayor, lo que demuestra la solidez de su estructura capaz de montar siempre representativos nacionales muy sólidos, independiente de altibajos generacionales.

Su superioridad sobre Chile en esta categoría lo refleja el cuarto lugar conseguido en el Mundial de Chile 2015. A la Rojita la sacaron del camino en octavos de final goleándola 4-1.

Entre los equipos que se enfrentarán mañana el saldo de amistosos previos arroja un triunfo para cada uno. Chile ganó 3-2 en octubre de 2016 y México se desquitó 3-1 en agosto pasado, en un cuadrangular jugado en sus tierras. Puede sonar a equiparidad, pero se trató de amistosos. A la hora de los puntos los mexicanos sacan lo mejor de sí.

En el clasificatorio de la Concacaf el “Tri” logró su séptimo título ganando en la final por penales a Estados Unidos. El equipo es dirigido por Mario Arteaga, el mismo del mundial de hace dos años en nuestro país. Ello revela la continuidad de los procesos en una nación de la que Chile tiene futbolísticamente mucho que aprender.