Arrestan a empleada de funeraria en Texas por experimentos ilegales
Adeline Ngan-Binh Bui enfrenta graves cargos tras realizar prácticas científicas no autorizadas con restos humanos en su funeraria de Austin.

Una alarmante situación quedó al descubierto en Austin, Texas, luego que una empleada de Capital Austin Mortuary Services, Adeline Ngan-Binh Bui, fuera arrestada por realizar experimentos clandestinos con brazos amputados de cadáveres antes de enviarlos a cremación.
La investigación, liderada por la Policía de Austin (APD) y la Comisión de Servicios Funerarios de Texas (TFSC), reveló un manejo irregular y profundamente perturbador de restos humanos.
Según los antecedentes, la mujer, de 50 años, utilizaba herramientas eléctricas contaminadas y documentaba el proceso mediante fotografías de extremidades en descomposición. Inyectaba formaldehído en los tejidos para analizar sus efectos, acciones completamente fuera de cualquier autorización legal.

Manipulación de registros y denuncias internas
La detención de Adeline se produjo tras la denuncia de un ex embalsamador, quien acusó a la mujer de falsificar al menos 10 certificados de defunción usando su identidad profesional.
Durante la revisión de la morgue, las autoridades detectaron 129 casos de documentos oficiales manipulados, práctica que le permitía mantener operativo su negocio sin las debidas certificaciones.
Adeline enfrenta cargos por abuso de cadáver y manipulación de registros gubernamentales, aunque quedó en libertad tras pagar una fianza de 27.500 dólares, equivalente a cerca de 25 millones de pesos chilenos. Su defensa asegura que trabajarán para proteger su derecho a un juicio justo.
Vínculos con empresa médica en la mira
Durante su declaración, la implicada reconoció que también trabajó en conjunto con MedtoMarket, empresa de capacitación médica, para realizar experimentos en al menos 15 cuerpos.
Si bien el director de la firma negó haber presenciado directamente las prácticas, admitió conocer el embalsamamiento experimental de extremidades.
La policía incautó dispositivos electrónicos de la acusada para profundizar la investigación. El proceso continúa abierto, mientras las autoridades reiteran su compromiso de velar por el respeto y la dignidad de los restos humanos en el estado de Texas.