Columna de Leonardo Véliz: En los gustos hay mucho escrito

Esta semana, el diario La Tercera, publicó “El Equipo de los 100 años de Colo Colo”. Felizmente, y lo reconozco, me dio alegría estar en los 11 mejores jugadores de la historia del “Cacique”.

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Por Leonardo Véliz
Actualizado el 22 de abril de 2025 - 12:35 pm

Leonardo "Pollo" Véliz, con la camiseta de Colo Colo, junto a Carlos Caszely y Elson Beyruth / Foto: ARCHIVO

En nuestra sociedad hay mucha hipocresía cuando se trata de los méritos para recibir reconocimientos.

Nadie puede negar que el hombre vive de recompensas y se aferra al yo unido al narcisismo; la recompensa económica es una de ellas, otra la espiritual y otra sólo el aplauso efímero, esa aclamación transitoria, fugaz, pasajera.

Cuántos premios han sido entregados por causas de intereses políticos, otros por intereses comerciales y muchos por pagos de prebendas diversas.

En esta cancha juegan todos, moros y cristianos, Pedro, Juan y Diego, ignorantes y letrados. En muy pocos (los que tienen la sartén por el mango) reina la razón, el conocimiento, la investigación, la ciencia. En otros, en la mayoría, impera la emoción, el entusiasmo, la pasión, las sensaciones, los estados de ánimo, los sentimientos superfluos, etc.

Humildad es la palabra

En Chile, para poder destacar tus cualidades frente a un halago, elogio, reconocimiento, personalmente debes anteponer adjetivos para que no te tachen de “soberbio, falto de humildad, orgulloso, arrogante, desprecio hacia los demás, prepotencia, falta de modestia».

O sea, victimizarte frente a la masa para no caer en las garras de Pedro, Juan y Diego. Para no poner en riesgo tu “popularidad”. El inicio del relato sería el siguiente: “Damas y caballeros, con mucha humildad, sin soberbia, sin arrogancias y falta de modestia, recibo estos halagos, este premio a mi perseverancia profesional con que me distinguen. Muchas gracias”.

Con esas breves palabras, te limpias de cualquier asomo de desprecio hacia los demás. Higienizas la mente de la envidia. Yo me pregunto: ¿por qué debo justificarme como un ser justo, honrado para recibir algo merecido?

Una alegría

Esta semana, el diario La Tercera, publicó “El Equipo de los 100 años de Colo Colo”. Felizmente, y lo reconozco, me dio alegría estar en los 11 mejores jugadores de la historia del “Cacique”.

¿Quiénes votaron para la conformación de este equipo estelar? Jugadores y entrenadores de fútbol, históricos con conocimiento de causa. Elegidos por sus tareas profesionales y logros conseguidos, por su importancia en lo que significa UN EQUIPO. Y no por un populismo de una masa que se deja llevar por el marketing periodístico, el sentimiento, el entusiasmo y liviandad.

En mi caso particular, revisé la historia de Colo Colo y el Albo tuvo de punteros izquierdos a: Aranda en los años 50, Bernardo Bello en los 60, Víctor Zelada y Roberto Frojuelo (brasileño) y Leonel Sánchez en los 70. Y de ahí en adelante, yo, Simaldone, Rubén Martínez. Punteros netos, pegados a la raya. Todos los otros fueron injertos de un necesario planteamiento táctico.

Por mi autoestima equilibrada, mi responsabilidad profesional, mi cuidado corporal en todo sentido (descanso, alimentación, entretenimiento) mis habilidades técnicas, cualidades físicas, inteligencia táctica y por entender el significado de ciencia, creencia y experiencia, merezco esta nominación. La felicidad es una forma de excelencia.