Formadores chilenos inician ambicioso proyecto deportivo en Bolivia
La recientemente inaugurada Escuela de Fútbol de Cracks, en La Paz, es una iniciativa que pretende entregar mejores herramientas a los niños que sueñan con llegar al profesionalismo. Dirigida por Javier Garcés, ex coordinador del área formativa de la UC, la academia pretende nutrir de nuevos talentos al fútbol boliviano.
“Existen grandes valores dentro de la escuela. La idea es formar jugadores y personas de bien y ojalá con esto se pueda aportar al fútbol boliviano, porque uno como parte del continente no le gusta que otros países vengan a ganar a los sudamericanos, si nosotros somos los que proveemos de jugadores a las mejores ligas del mundo”.
Las palabras corresponden al saludo de Alfonso Garcés, jefe de captación de la UC, invitado de honor el pasado 9 de julio a la inauguración de la Escuela de Fútbol de Cracks, ubicada en la zona sur de La Paz.El profesional chileno de dilatada trayectoria sabe de lo que habla. Gary Medel, Mark González, Felipe Gutiérrez o Mauricio Isla son sólo algunos de los recientes ejemplos que comprueban que el reclutador de talentos tiene buen olfato a la hora de detectar prospectos de futbolistas.
La Escuela de Craks es dirigida por Javier Garcés, hijo de Alfonso, que dejó su cargo de coordinador del área formativa de la UC para encabezar este ambicioso proyecto en Bolivia. Otro chileno que se sumó a la iniciativa es el preparador físico Luis González –también ex cruzado-, que complementa el staff de profesionales integrado por otros cinco entrenadores bolivianos.
La academia responde a una iniciativa de empresarios altiplánicos que pretenden levantar el fútbol de ese país a través de un proyecto privado. Por lo mismo miraron al fútbol chileno, específicamente a San Carlos de Apoquindo, para que profesionales de Universidad Católica repliquen su exitoso modelo en la Escuela de Craks, que cuenta con tecnología de vanguardia para realizar todo tipo de mediciones.
Más que esperar por la llegada de talentos, la idea de la escuela es encontrarlos en Bolivia a partir de una búsqueda que considere aspectos técnicos, tácticos y físicos, para ir puliéndolos con conocimiento acabado y con la mejor tecnología para aportar al desarrollo del alicaído fútbol boliviano.
