Los porqué de la decisión para mantener a Peso Pluma en Viña

Imagen del autor

Por El Ágora
Actualizado el 18 de enero de 2024 - 12:00 pm

Las razones van más allá de temas conceptuales, como censura vs libertad de expresión, sino que fueron motivos meramente prácticos…

Por EL ÁGORA / Foto: ARCHIVO

El debate público en torno del cantante Peso Pluma y de su presencia en Viña del Mar agita las pautas veraniegas de los medios de comunicación, acompañado -siempre- por las voces de «expertos» que han pedido la salida del mexicano de la parrilla del certamen.

De pronto, la discusión se transformó en una especie de pugna entre quienes creen en el derecho a la libertad de expresión y otro sector que sostiene que las letras del «artista urbano» son una apología al crimen organizado, por lo que su presencia en el principal festival de la canción latinoamericana es insostenible.

Desde el Gobierno, hasta Televisión Nacional (una de las cadenas que transmitirá el evento, y cuyo directorio declaró que TVN «No puede compartir, transmitir, ni fomentar, repertorios alusivos a la violencia, el narcotráfico y otros elementos relacionados con la llamada ‘narcocultura’»), pasando por opinólogos de diferente peso intelectual, todos, de una u otra manera, han levantado voces en favor o en contra del mexicano.

Hace pocas horas, desde el propio festival se comunicó que “La organización del certamen identifica el prestigio internacional de Peso Pluma como artista. Su música, además de millones de escuchas en todas las plataformas, está presente también en importantes escenarios, siendo confirmado el día de ayer para Coachella, uno de los tres festivales más grandes del mundo”, y dio por zanjado el asunto: el cantante actuará en Viña (ver: Oídos sordos a las críticas: Festival de Viña ratifica a Peso Pluma (elagora.net).

Sin embargo, las razones de fondo fueron dos: que, a pesar de que realmente se pensó en «bajar» al mexicano, no había argumentos legales para hacerlo y esto podría dar pie a una demanda que sería un problema mayúsculo para la organización.

El segundo motivo fue cautelar la imagen del festival: sacar a Peso Pluma provocaría una especie de «efecto dominó», ya que otros artistas, por solidaridad, podrían renunciar a Viña, afectando la programación y el prestigio del evento, que pasaría a ser visto como una instancia retrógrada y censuradora, con todas las externalidades que eso conlleva.

Mantener al mexicano, en pocas palabras, evitará una demanda millonaria y revestirá a Viña como un certamen donde priman criterios «artísticos», por sobre cualquier consideración.

Los organizadores, entre paréntesis, ya se frotan las manos, pues el debate público por el tema fue la antesala perfecta para «calentar» esta versión del Festival y ya apuestan sobre el alto rating que tendrá Peso Puma la noche de su presentación…